Acerca de mí
La mejor manera de presentarme es compartiéndote que hoy soy una mujer plena, dichosa y feliz, lo cual también quiero que tu lo seas; Estoy aquí para brindarte todo mi apoyo en este proceso y logres tu objetivo, y claro, siempre de la mano de Dios.
Diversas experiencias, que en su mayoría no fueron muy gratas a mi vida, me han hecho crecer como madre, como hija, como mujer y como terapeuta; Hoy en día cuento con las herramientas necesarias para emprender mi jornada de vida; esto es ayudar a mujeres y hombres que necesitan apoyo por medio de un consejo o un medio para recuperar el aliento y seguir adelante al transformar sus vidas.
Desde pequeña me he caracterizado por la virtud de la empatía, podía conectar con las emociones de las personas, y me apasionaba escuchar las grandes historias de vida escondidas detrás de cada persona.
Mi gran pasión es la lectura. Pasión que heredé de mi madre, a quien en mi niñez observe siempre dándose el tiempo para un buen libro. Y fue a través de los libros que encontré mi vocación—la psicología; La psicología es—unida a Dios—una fuente de sanación interior y crecimiento personal. Después de un arduo camino, esfuerzo y tenacidad me gradué en psicología clínica. Tengo un diplomado en temas matrimoniales y familiares, además de una certificación en mentoría para crecimiento personal y asuntos de espiritualidad y Fe.
Creo firmemente que somos una dualidad—cuerpo y espíritu. Lo que pase a una de nuestras realidades irremediablemente afectará la otra. Esto me ha llevado por una jornada de búsqueda, preguntas y retos en mi Fe. Intentando fortalecer mi espíritu, he llegado a la maravillosa conclusión que sin Dios nada soy, nada puedo y nada tengo; Pero con Èl, todo soy, todo puedo y todo tengo.
Amo lo que hago, disfruto cada segundo en el que me dedico a impartir seminarios, talleres, conferencias y la asesorías personalizadas, doy mi corazón en estos espacios porque me permiten crecer mientras acompaño a las personas a incrementar su autoconocimiento y amor propio, para que así, en una expansión de consciencia, cada vez seamos más quienes logremos vivir la vida de una manera plena, dichosa y feliz.